Basta un solo click para hacer desaparecer un comentario, para establecer distancia con el comentarista, sin tener que dar explicaciones, diciendo que no interesa su opinión y que nadie se entere de lo que se le escribió.
Seguro solo busca la aprobación social, no acepta que piensen diferente y lo pongan en evidencia de cosas que no puede explicar. Esto revela su dificultad de comunicación e inseguridad.
El botón de borrado existe y está bueno que lo use en su mundo, en su muro.
El tema es que diciéndose un ser político, no puede obviar los comentarios buenos y malos, y detenerse solo en los buenos. La democracia se basa en convivir con diferentes opiniones y rescatar de ellas los elementos para buscar soluciones.
El mundo real no se hace de comentarios favorables, tampoco se menosprecia a la gente por pensar diferente, porque a la larga después es a esa gente a la que también busca para que le dé su voto.
No hay coherencia, no hay transparencia, solo una gran hipocresía y subestimación del ciudadano.