La reciente tormenta que azotó la zona de la Quebrada dejó severos daños materiales, afectando a numerosas familias que perdieron gran parte de sus pertenencias. Ante esta situación, la respuesta solidaria de la comunidad no se hizo esperar, con donaciones y asistencia por parte de diferentes sectores. Sin embargo, el desafío sigue siendo que esta ayuda llegue a quienes realmente la necesitan y que el compromiso se mantenga en el tiempo.
En comunicación telefónica, la Dra. Liliana Casimiro informó que un equipo de salud se encuentra en la zona de Gobernador Sola realizando un relevamiento de la situación. Entre el mismo personal del Hospital Dr. Francisco Herrera de Campo Quijano, se organizaron para recolectar ropa, insumos médicos, agua y medicamentos, que fueron llevados directamente a los damnificados.
En algunos sectores, los propios afectados manifestaron que esta era la primera asistencia que recibían desde la tormenta. La doctora destacó que la necesidad de calzado en distintos números es urgente debido al barro acumulado en la zona, además de agua potable y alimentos no perecederos.
Durante el recorrido,hasta el momento de la entrevista, el equipo de salud encontró al menos siete familias en una situación crítica, muchas de ellas con pérdidas totales. «El agua ingresó en las viviendas y ahora están afuera, refugiados en carpas. Están bien de salud, pero han perdido animales y pertenencias esenciales. Lo más preocupante es que no tienen con qué cocinar», relató Casimiro. Ante esta situación, se les entregó alimentos y una gran cantidad de pan para cubrir sus necesidades inmediatas.
A pesar de las dificultades del terreno, el equipo planea continuar su recorrido a pie hacia los parajes más alejados, donde el acceso a la ayuda es aún más limitado. Estos sectores, al no estar sobre la Ruta 51, reciben menos asistencia y requieren una evaluación directa para coordinar una respuesta efectiva.
La comunidad ha demostrado una gran solidaridad, pero aún se necesita más apoyo. Se solicita a quienes puedan colaborar que prioricen donaciones de calzado, agua y alimentos no perecederos. Es fundamental que la ayuda siga llegando de manera organizada y sostenida en el tiempo para garantizar que ninguna familia quede desamparada ante esta difícil situación.
Escucha la entrevista.














