La construcción del esperado bypass que conectará la Ruta Nacional 51 con la Ruta Provincial 36 avanza y ya genera gran expectativa entre los vecinos. Esta importante obra vial tiene como objetivo principal desviar el tránsito pesado —especialmente el vinculado a la actividad minera— que actualmente atraviesa el centro urbano de la localidad, generando molestias y riesgos para la comunidad.
El proyecto, financiado por el sector minero a través de un convenio entre la Dirección de Vialidad de Salta y Recursos Energéticos y Mineros de Salta S.A. (REMSa), representa un cambio estructural en la dinámica urbana, social y productiva del pueblo. La nueva traza se desarrolla sobre la margen izquierda del río Toro, bordeando el casco urbano y ofreciendo una alternativa segura para el transporte de cargas.
Con el respaldo del Gobierno de Salta y la posibilidad de financiamiento adicional por parte del Banco de Desarrollo Fonplata, la obra cobra impulso como una infraestructura clave para el desarrollo logístico de la región, en especial para el crecimiento de la actividad minera. Pero además, se destaca su impacto positivo en la vida cotidiana de los habitantes de Quijano: al reducir el tráfico de camiones en el centro, se mejorará la seguridad vial, se protegerá el patrimonio urbano y se fomentará un entorno más amigable para los peatones.
Los trabajos en la zona ya son visibles y generan expectativa en la comunidad, que observa con atención el avance de una obra que no solo aliviará el tránsito actual, sino que abrirá nuevas posibilidades para la inversión privada y el desarrollo productivo del área.
