Así lo afirmó el Gobernador de Salta después de su visita al norte de la Provincia para inaugurar el Centro de Recuperación Nutricional y verificar las obras para llevar el agua a las comunidades.

El gobernador de la Provincia de Salta, Gustavo Sáenz, se refirió a la situación de los niños que fallecieron en comunidades originarias durante estos primeros meses del año y dijo que es muy triste más allá de que hayan muerto por desnutrición o por COVID-19.

Sáenz agregó que estuvo en Santa Victoria hablando con los caciques y le transmitieron que no quieren vacunarse contra el coronavirus porque entienden que no es bueno. El mandatario afirma que les explicó que científicamente está comprobada la efectividad de cualquier vacuna pero resulta muy difícil hacerlos cambiar de pensamiento. 

Por último, Saenz remarcó que la situación del norte argentino no es solamente de ahora sino que lleva su tiempo. Sin embargo, en estos últimos dos años, se hicieron cosas que nunca se pensaron como abrir un centro de recuperación nutricional ya que muchos niños están desnutridos. También continúan con el plan de agua para que tengan el servicio como corresponde.
 

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