"Que diga lo que quiera, no me interesa". Y un día se cansó. Leo Messi, el que no tiene problemas con nadie, el que todos en el mundo de la pelota respeta no sólo por su mágica zurda sino por su otra calidad, la humana, un día se cansó de Robert Lewandowski. Fue tras la entrega del Balón de Oro 2021 que se generó una rivalidad que nació desde el polaco y que se fue potenciando por el peso de ambas figuras y de sus declaraciones. Y que ahora, tendrá su capítulo mundialista.

Leo Messi, durante la práctica de este lunes en la Unviersidad de Qatar.

Sí, la previa va tomando temperatura. Al punto que apenas llegó a Qatar, el goleador polaco que hoy juega en el Barcelona (justo en el club de toda la vida de Leo), ya se sintió incómodo cuando le preguntaron sobre el 10. En horas, estarán otra vez cara a cara, a la vista de todo el planeta fútbol. ¿Cómo será el encuentro? ¿Y el saludo? Porque encima, ambos son capitanes: habrá sorteo y foto.

Mientras todo el mundo está ansioso por este cruce, Leo lo espera con la tranquilidad del deber cumplido. El triunfo ante México también cambió el semblante del 10, como el de todo el equipo. En estas horas, se lo vio volver a disfrutar. Y cuando Leo sonríe, siempre es una buena noticia para la Selección, que sabe muy bien que se viene un partido especial, no sólo porque está en juego la clasificación sino también por este duelo de arrastre entre dos súper estrellas.









Fuente; Olé