Indicó que aún no fue citado como testigo pero espera que esto suceda, por la foto que sacó en San Pedro de Jujuy. “Nunca me imaginé que con la foto de esa noche podía terminar como interventor del municipio de Aguaray”

“Encontramos un municipio llamativamente descontrolado desde lo administrativo, debía un presupuesto mensual entero. Se recaudaban 17 millones de pesos mensuales y se debían 19 millones de pesos más dos meses de sueldos de trabajadores”, señaló.

Además, contó que el gobernador les dijo que llegaba a un municipio ordenado y fue todo lo contrario. “Tardamos siete meses ahorrando para pagar las deudas.

Por otra parte, manifestó que en Aguaray hay 600 empleados municipales, cuatro veces más de lo que debería haber de acuerdo al cálculo de un trabajador cada cien habitantes. “Deberíamos tener 150 empleados y tenemos 600”, señaló y agregó que de una población total de 15 mil habitantes, 7500 son originarios que no pagan impuestos.

Finalmente, indicó que fue el propio gobernador quien le pidió que evite los despidos de operarios, teniendo en cuenta la crisis por la pandemia.