Un proyecto integral para beneficiar a alumnos y docentes de una escuela, pero también a vecinos y transeúntes.

Lo alumnos de la EET Galileo Galilei, ubicada en el municipio de Campo Santo, elaboraron y desarrollaron un sistema de semáforos con la intención de instalarlos sobre las dos avenidas que rodean a la escuela "Antonino Fernández Cornejo", para darle mayor seguridad a los alumnos y docentes ante el intenso tránsito vehicular en ambas arterias.

En el desarrollo del proyecto los alumnos analizaron que la zona reviste peligro por el alto tránsito, sobre todo en las horas pico, con el consecuente riesgo para la comunidad educativa y para los vecinos y transeúntes.

El proyecto fue desarrollado para ser presentado en una competencia a nivel provincial organizada por el INET, logrando superar las dos primeras instancias para luego ganar el derecho a participar en una instancia superior de la competencia, esta vez a nivel nacional.

Esta última instancia que se va a llevar a cabo antes de fin de mes, en la provincia de Buenos Aires de acuerdo a lo informado por los organizadores. "Nuestros alumnos, en colaboración con los docentes del área elaboraron un proyecto para presentar en una competencia del INET a nivel provincial. Las instancias fueron superadas hasta llegar a la instancia final a nivel nacional. El proyecto consiste en el desarrollo de un sistema de semáforos, los cuales fueron diseñados y desarrollados en forma completa por los chicos, desde la programación, construcción de plaquetas, cableado, instalación de receptores y transmisores de radiofrecuencia y las luces led. Lo único que no podíamos realizar era el chasis de los semáforos, pero por suerte contamos con el apoyo de la concejal Susana Arce, quien gestionó una entrega en Salta, las cuales recibimos durante la presente semana", explicó el profesor Guillermo Ortega, coordinador del proyecto.

Encuestas en las viviendas 

Las primeras actividades para el desarrollo del proyecto comenzaron con encuestas realizadas en las viviendas cercanas al sector elegido para instalar los semáforos.

El resultado de estas encuestas indicaba que el 90 por ciento de los vecinos estaba de acuerdo con la necesidad de contar con semáforos en las cercanías de la escuela, algo que en forma indirecta también beneficiaría al resto de las cuadras, debido a que la 9 de Julio es una calle recientemente repavimentada.

En dicha arteria circulan a gran velocidad, especialmente los motociclistas. En el lugar los accidentes son muy frecuentes, algunos de ellos con resultados fatales.

"Una vez que obtuvimos podríamos decir el permiso de la comunidad, se realizó una observación y posterior análisis de los resultados del movimiento del alumnado al ingreso y egreso a clases. Con esa información se consensuó sobre los lugares más convenientes para la instalación de cada semáforo", explicó Ortega.

Serán 4 columnas con un semáforo cada una

En total serán 4 columnas con un semáforo cada una, ubicadas para controlar el tránsito sobre la doble mano de la avenida 9 de Julio. El ingreso de vehículos sobre una nueva calle abierta para el acceso a los nuevos barrios, que desemboca frente al portón de ingreso al establecimiento educativo, y los otros dos controlando el movimiento vehicular sobre avenida Vicente Solá.

"Se trabajó por varios meses en la programación del sistema, la construcción de los circuitos, las plaquetas, los controladores, solo nos faltaba toda la carcasa donde se colocan las luces. Eso era algo que no podíamos fabricar. En este sentido tenemos que agradecer la gestión de la concejal Susana Arce, quien consiguió la donación de semáforos en desuso", indicó.

Un proyecto para llevar soluciones

La gestión del proyecto fue mas allá de las instancias del concurso, ya que la idea fue llegar a la comunidad con soluciones para un evidente problema. Así fue que tras las consultas, el estudio de campo y la elaboración técnica, al sistema de semáforos construido por los alumnos le faltaba el soporte de metal. Pero este inconveniente no fue un impedimento para seguir adelante con la idea.

Es así que una gestión desde el Concejo Deliberante local consiguió que la Dirección de Tránsito de Salta capital done los armazones que estaban en desuso. "Esos soportes fueron desmantelados y reacondicionados y quedaron listos para instalar la nueva tecnología. Ahora está todo para ponerlos en su lugar", indicó el docente. 

 Para finalizar con el proyecto y  evaluar su funcionamiento necesitan el permiso municipal, algo que ya fue solicitado. El sistema de semáforos  fue declarado en el Concejo Deliberante de Campo Santo de interés municipal, aprobando además un proyecto de declaración por medio del cual se le solicita al Ejecutivo que otorgue el permiso para su instalación. Una ventaja muy importante es el hecho que por tratarse de un sistema elaborado por una escuela técnica, serán ellos quienes se hagan cargo de su mantenimiento, evitando los grandes inconvenientes que se generan cuando un semáforo deja de funcionar a la espera del arribo de personal especializado de la empresa que lo instaló, o del envío del repuesto de la pieza dañada, lo que puede demandar días o semanas, con un semáforo sin funcionar.

Fuente: El Tribuno

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