El presidente del Ente Regulador de Servicios Públicos, Carlos Saravia, se refirió a la crisis del agua que detonó en gran parte de la provincia en las últimas semanas. En este contexto, el funcionario dejó entrever que esto se debe, en parte, a que “solo un 12% de las obras hídricas del Fondo de Reparación Histórica se hicieron”. Además, dijo que hay que direccionar las obras para los departamentos más necesitados, pero al mismo tiempo controlar que se hagan, no solo el Ente Regulador, sino también la Auditoría y la Sindicatura. 

Por Aries, Carlos Saravia habló sobre la falta de agua que hay en gran parte de Salta y dijo que alguna vez hubo personas que pregonaron las bondades del Fondo de Reparación Histórica, pero remarcó que esto no se ha cumplido, al hacer referencia a las obras hídricas. “También algunas estuvieron incluidas en el Fondo del Bicentenario y tampoco se cumplieron”, agregó.

En el mismo sentido, Saravia comentó que hicieron un relevamiento y señaló que “solo un 12 por ciento de las obras hídricas comprometidas en el Fondo de Reparación Histórica se hicieron”. “Esto habla que hay un 88 por ciento que ha quedado sin ningún tipo de justificación”, aseguró y también dijo que habían previsto hacer pozos con aquel empréstito, “pero no se hicieron”. “Otros se hicieron y no dieron el resultado que se esperaba”, añadió.

Para el presidente del Ente Regulador se deben direccionar las obras para los departamentos más necesitados, pero al mismo tiempo controlar para que se hagan. En este mismo sentido, dijo que tiene que realizar este control el Ente, pero también la Auditoría y la Sindicatura. 

Por otro lado, Carlos Saravia se refirió a las asimetrías que existen entre los sectores de alto poder adquisitivo y los más vulnerables, cuando se trata de pagar por el servicio de agua potable. “En todos los desarrollos inmobiliarios de la provincia hay barrios privados. Ellos pagan por el agua un canon de $500 anuales por hectárea y no le piden agua a Aguas del Norte, le piden a Recursos Hídricos”, aclaró.

Finalmente, explicó que, contrariamente, en la zona sudeste de la ciudad, una de las más pobres, pagan $500 por mes, por un lote de 10 por 10. “Otros que tienen un poder adquisitivo mucho más alto, no pagan nada por el agua”, sentenció.

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