El presidente de la Sociedad del Estado a cargo de la formación, Sebastián Vidal destacó los niveles de “reactivación” turística y económica pos pandemia en Salta, y subrayó que este especial servicio de pasajeros viene “batiendo récords enero, febrero, marzo y abril”.

En el mes de julio, en plena temporada de invierno, el Tren a las Nubes -el único de altura en el país y el tercero más alto del mundo- cumple su 50 aniversario en una actividad “que en 1972 empezó a surcar las montañas y serpentear los Andes y la Puna” en la provincia de Salta, describió este viernes el presidente de la Sociedad del Estado a cargo de la formación, Sebastián Vidal.

Lamentablemente el verdadero viaje del Tren a Las Nubes quedó desvirtuado al recorrer solo un tramo de 20 kilómetros desde San Antonio de los Cobres hasta el Viaducto de la Polvorilla, cuando en realidad el auténtico trayecto era salir de la Estación en la ciudad de Salta.

Atravesaba el Valle de Lerma para introducirse en la Quebrada del Toro y llegar hasta la Puna con una capacidad para 468 pasajeros y a una velocidad máxima de 35 km/h en un recorrido de 434 km (entre ida y vuelta).​

Es el tercero en el mundo por la altura que recorre Desde 2015, el Tren a las Nubes incluye salida en autobús desde la ciudad de Salta, recorriendo por la RN 51 las localidades de Campo Quijano y Gobernador Solá hasta llegar al paraje El Alfarcito. Luego el viaje continúa por la Quebrada de las Cuevas y después la llanura de Muñano para llegar a San Antonio de los Cobres.

Se trata de una obra épica de la ingeniería que pasaba por 29 puentes, 21 túneles, 13 viaductos y varios rulos y zigzags en las laderas de las montañas, transitaba impactantes paisajes de la Puna y que recorría 217 kilómetros en un viaje fantástico que se acortó a solo 20 kilómetros.

Lamentablemente el mal estado de las vías que nunca fueron reemplazadas hicieron que el Tren a Las Nubes se convierta en un verdadero peligro porque podría descarrillar en cualquier momento y producir una tragedia de grandes proporciones, razón por la cual dejó de circular desde Salta.

Actualmente el viaje es en colectivo hasta la estación de trenes de San Antonio de los Cobres. Allí, los viajeros se embarcarán en el Tren a las Nubes que los llevará al Viaducto la Polvorilla. El recorrido es de una hora hasta el Viaducto, a 4.200 m s. n. m., donde se atraviesa la obra más imponente de la ingeniería del siglo pasado.

Richard Maury se hizo cargo del proyecto desarrollado por el ingeniero bávaro Josep Heinrich Theodor Rauch, teniendo en cuenta el principio de adherencia de las ruedas del tren a las vías, desechando el sistema de cremallera comúnmente usado para que las formaciones ferroviarias puedan trepar las alturas. No utiliza ruedas dentadas, ni siquiera para las partes más empinadas de la subida ya que las vías están dispuestas de una manera especial circulando por un sistema de zigzags y espirales. ​

El tren como emprendimiento ferro turístico nace por iniciativa de las autoridades del Ferrocarril General Belgrano, quien, en noviembre de 1971, resuelven hacer correr un tren experimental con funcionarios y periodistas.

El 16 de julio de 1972 se realiza el primer viaje turístico de carácter oficial, permaneciendo hasta 1990 en mano de Ferrocarriles del Estado y, desde 1991, en mano de capitales privados salteños.

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